La procesión yacente en Zamora: una tradición llena de devoción

La procesión yacente en Zamora: una tradición llena de devoción

La Semana Santa en Zamora, España, es conocida por sus impresionantes procesiones que atraen a miles de visitantes cada año. Una de las más destacadas es la procesión yacente, que se lleva a cabo el Viernes Santo. Este evento religioso conmemora la muerte y sepultura de Jesucristo.

La procesión yacente es especialmente conmovedora, ya que se realiza en silencio y en completa oscuridad. Los penitentes, vestidos con túnicas moradas y cubiertos con capirotes, llevan el paso de Cristo yacente, una escultura magnífica tallada en madera. La devoción de los participantes y el ambiente sobrecogedor hacen de esta procesión una experiencia única e inolvidable.

Procesión yacente en Zamora: tradición y devoción

La procesión yacente en Zamora es uno de los eventos más destacados de la Semana Santa en esta ciudad de Castilla y León, en España. Esta tradición religiosa, llena de devoción y fervor, es una de las más antiguas y reconocidas en todo el país.

Procesión yacente en Zamora

La procesión yacente se lleva a cabo el Viernes Santo por la noche, y consiste en el traslado de la imagen de Cristo yacente desde la iglesia de San Juan de Puerta Nueva hasta la Catedral de Zamora. Esta imagen representa a Jesús después de su crucifixión, reposando en un sepulcro.

La procesión es encabezada por el paso del Santo Sepulcro, una impresionante estructura de madera tallada y dorada que representa el sepulcro de Cristo. Detrás de este paso, se encuentra el paso de la Virgen de la Soledad, que simboliza el dolor y la tristeza de la madre de Jesús en su momento de luto.

La procesión recorre las calles de Zamora en un ambiente de silencio y recogimiento, iluminado únicamente por las velas que portan los penitentes y los fieles que acompañan el cortejo. Las calles se llenan de devotos y turistas que acuden a presenciar este impresionante espectáculo de fe y religiosidad.

La procesión yacente en Zamora tiene sus orígenes en el siglo XIII, cuando se fundó la Cofradía de la Vera Cruz, encargada de organizar y llevar a cabo esta tradición. A lo largo de los siglos, la procesión ha ido evolucionando y adquiriendo mayor solemnidad, convirtiéndose en uno de los actos más importantes de la Semana Santa zamorana.

Uno de los momentos más emotivos de la procesión es cuando los cofrades levantan en alto el paso del Santo Sepulcro para que el público pueda contemplar la imagen de Cristo yacente. Este gesto simboliza el dolor y el sacrificio de Jesús por la humanidad, y genera una gran emoción entre los presentes.

La procesión yacente en Zamora es una manifestación de fe que ha sido reconocida como Bien de Interés Cultural, lo que demuestra su importancia y valor cultural. Además, ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, lo que ha contribuido a su difusión y atrae a miles de visitantes cada año.

En definitiva, la procesión yacente en Zamora es una tradición arraigada en la ciudad y que ha logrado mantenerse viva a lo largo de los siglos. Es un evento que combina la religiosidad y devoción con la belleza artística de los pasos procesionales, y que constituye un momento de encuentro y reflexión para los zamoranos y para todos aquellos que acuden a presenciarla.

La procesión yacente en Zamora: una tradición llena de devoción

La Semana Santa en Zamora es conocida por sus impresionantes procesiones, y una de las más destacadas es la procesión yacente. Este emotivo desfile religioso se caracteriza por la representación de la imagen de Cristo yacente, que es llevada en andas por los cofrades y seguida por miles de devotos.

La procesión yacente es un momento de profunda reflexión y recogimiento para los zamoranos, que se sumergen en un ambiente de fervor religioso. La imagen del Cristo yaciente, con su semblante sereno y su cuerpo inerte, transmite un mensaje de sacrificio y redención que conmueve a todos los presentes.

Esta tradición, que se remonta a siglos atrás, ha logrado perdurar en el tiempo gracias a la devoción y dedicación de los zamoranos. Cada año, la procesión yacente se convierte en un encuentro con la fe y en una oportunidad para renovar los votos de los creyentes.

En definitiva, la procesión yacente en Zamora es un símbolo de la fe y la devoción de su pueblo. A través de esta tradición, los zamoranos mantienen viva la llama de su religiosidad y demuestran su profundo amor por Cristo.

Alberto Fernández

Hola, soy Alberto, un apasionado experto en cofradías y hermandades. En la página web de la Cofradía La Humildad encontrarás toda la información que necesitas sobre turismo religioso, tradiciones y eventos relacionados con las cofradías. Mi pasión por estas manifestaciones de fe me impulsa a compartir mi conocimiento y experiencia con todos los visitantes de la página. ¡Bienvenidos a este portal dedicado a la humildad, la devoción y la tradición!

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